Para profundizar en su filosofía, hablamos con Magda Cebrián y Martí Morató, fundadores de la App GoZeroWaste, una aplicación que nos ayuda a encontrar tiendas donde se practica el residuo cero y también propone retos para adquirir hábitos que ayuden a nuestro planeta.
– Generamos una media de 1,2 kg de basura al día, ¿somos la generación del usar y tirar?
– Sí, venimos de esto y es necesario hacer un cambio muy importante, tanto a nivel individual como empresarial. Debemos avanzar hacia un modelo de economía circular, imitando la naturaleza y sus procesos hasta conseguir que el concepto de residuo en sí, no exista porque todo sea considerado un recurso. Existen tres R que hace tiempo que oímos: reducir, reutilizar y reciclar, pero desde hace décadas se incide en el reciclaje, cuando éste está al final de la cadena. Lo que debemos priorizar es el reutilizar y reducir, para alargar la vida de los recursos al máximo. Reciclar ya se ha demostrado que es insuficiente, debemos ir más allá.
– ¿Cómo podemos llegar a concienciar a la población? Parece que no hemos sido capaces ni de llegar a reciclar bien…
– Reciclar de manera óptima es muy difícil, es confuso. Las empresas ponen en el mercado miles de productos, hechos con miles de envases y tú, consumidor final, tienes que saber dónde va cada cosa. Nosotros defendemos que el consumidor tiene responsabilidad, pero que la responsabilidad inicial es de la empresa, que debe diseñar el producto pensando en todo su ciclo. Si en vez de usar treinta tipos de envases nos encontrásemos solo diez, sabríamos perfectamente como reciclarlo.
– ¿Resulta más caro hacerlo así?
– La gente que intenta consumir sin generar residuos, el primer impacto que se encuentra es el aumento del coste, pero como todo, es un aprendizaje. Primero te costará más, pero con el tiempo sabrás dónde comprar cada cosa, notarás que comprar a granel te sale mejor porque en grandes cantidades puedes ahorrar… pero es más que eso. El movimiento Zero Waste también propone comprar menos y de más calidad.
– Explícanos un poco en qué consiste la aplicación Go Zero Waste
– Hace poco más de un año intentamos hacer un ejercicio: realizar la compra íntegra de la semana y volver a casa sin un plástico. Vimos que fruta, verdura, carnes, pescados… en definitiva, los alimentos frescos, es relativamente fácil porque llevamos nuestro tupper o la bolsa, lo cual no pasaba con otros productos, como el detergente a granel y cosmética natural… Y entonces pensamos, ¿cómo podríamos facilitar las cosas a la gente que quiera comprar así? Y creamos la aplicación GoZeroWasteApp.
En la aplicación, hay una parte que te enseña un mapa donde se localizan, por barrio o por producto, los establecimientos que tienen lo que buscas.. Paralelamente, la aplicación tiene una parte de retos, porque hay hábitos que también son muy importantes, como llevar una botella de agua siempre encima o una bolsa reutilizable… gestos sencillos.
– ¿Ha tenido buena acogida?
– Sí, estamos contentos porque la gente que quiere practicar el Zero Waste dice que la App los ha ayudado y estamos a punto de sacar una segunda versión que mejorará algunos aspectos. Pero nuestro reto es llegar al gran consumidor, queremos que la persona que va a una gran superficie y no sabe qué es el Zero Waste se llegue a plantear poder hacer este cambio.
– Hay un trasfondo social y emocional en este movimiento. Somos una sociedad materialista. El movimiento va a la contra de esta manera de vivir…
– Vivimos en una sociedad materialista, basada en la producción. Realmente, ir en otra dirección es todo un reto y podemos conseguir que modelos reutilizables, también sean rentables. Por ejemplo, la mayoría de productos de limpieza son en un 80% agua que se mezcla con químicos. Imagina si la empresa pudiera vender un pote pequeño solo con el concentrado químico y tú con ello pudieras crear el producto de limpieza. Esto es beneficioso para el consumidor pero también para la empresa que reduce costes en envases, en espacio y en transporte. Son este tipo de soluciones las que debemos pensar, desarrollar y promover.
– ¿Qué papel deben adoptar las administraciones en este cambio de modelo de consumo?
– Tienen un papel clave y además, les interesa. Los países occidentales se quedan los residuos que pueden reciclar y revalorizar; los que no, se envían a los países subdesarrollados o países que los compran. Pues bien, el año pasado China dejó de aceptar estos plásticos de bajo valor. Ahora Europa, no puede quitarse de encima estos residuos y ello va asociado a unos costes que antes no tenia y es necesario buscar alternativas.
– ¿Cómo ves el futuro?
– Soy optimista, pero también creo que vamos tarde. La comunidad científica y la ONU hace tiempo que nos alertan de que los efectos del cambio climático pueden llegar a ser irreversibles, habrá muchos conflictos por la lucha de recursos y tristemente los primeros que lo notarán son los países pobres.
Pero también veo que a las nuevas generaciones actúan; con ellas viene un poder de decisión importante para cambiar las cosas. La presión del consumidor obligará a las empresas a crear nuevos productos y formas de consumir sostenibles, es una rueda.
– ¿Cuáles serán los próximos pasos del movimiento?
Creo que el Zero Waste se convertirá en una capa más del consumo sostenible. Existía el reciclaje, la compra local, el consumo de productos ecológicos… diferentes esferas del consumo responsable que se está instalando en nuestras vidas gracias a una mayor información. Abrir los ojos a la gente también sensibiliza y hace que la sociedad reaccione. Debemos actuar con inmediatez.
Precisamente la posición de los consumidores que menciona Magda ejerce y continuará ejerciendo una presión fuerte en las empresas, que terminarán optando cada vez más por la sostenibilidad y reducción de residuos como política integral. Por ello, desde Withfor, continuaremos promoviendo alternativas para impulsar desde la empresa en la creación de valor positivo para la sociedad, de forma honesta y responsable no solo con nuestros clientes, sino con las comunidades y el medio ambiente.
